Sobre el cariño
En el ejercicio de buscar la definición en el DRAE (Diccionario de la Real Academia Española), la primera acepción de este concepto es "Inclinación de amor o buen afecto que se siente hacia alguien o algo". Por lo tanto, uno pudiera asumir que lo que uno siente por una persona importante en la vida, las mascotas que nos han acompañado, e incluso eso que sentimos tan enfermizamente por nuestros smartphones puede definirse como cariño. Entonces, ¿cómo lo diferenciamos? Esta inclinación de amor debiera ser simple de diferenciar si entre mis opciones coloco a mi hermano, mi perro y mi iPhone... el problema es que con sólo uno de ellos comparto la mayor parte del tiempo y hasta literalmente podría decirse que me acompaña 24/7.
La segunda acepción de cariño es la "manifestación de dicho sentimiento" (y se menciona que es más utilizada en este contexto en plural), como cuando lo usamos para despedirnos cariñosamente de alguien en un mensaje: "Cariños desde Chile". Lo manifestamos en este caso por escrito, pero ¿lo sentimos? Es sólo ampliamente aceptado quizás. Se ve bonito. Se siente bien.
La tercera acepción es "añoranza, nostalgia". Como cuando recordamos a alguien o algo "con cariño". Porque se supone que con esta acepción ya nos hemos sentido inclinados amorosa o afectivamente hacia alguien o algo. Yo siempre he querido poder recordar el momento de mi nacimiento, por ejemplo. Mi madre me ha mencionado que fue inolvidable y que lo recuerda con mucho cariño. Cuando le pregunté si sentía lo mismo al recordar el momento de mi concepción, sólo rió... con cariño.
La cuarta acepción quizás está precisamente asociada a lo que acabo de mencionar. Hace mención al "esmero, afición con que se hace una labor o se trata una cosa". Esmero. Afición. Tal como quiero pensar que fui concebido. Tal como quiero pensar que hago las cosas que hago. Tal como quiero que sientan los otros de mí por esas cosas que hago. Por las cosas que digo. Por las que dedico mi tiempo y energía. Porque las he hecho con cariño.
Por último, la quinta acepción es "regalo, obsequio". Como cuando uno le hace un cariño a alguien, o sea, cuando le regala u obsequia algo a alguien. Sin embargo, eso no quiere decir que dicho gesto se haya hecho cariñosamente. Muchos presentes cumplen más con el objetivo de cumplir con llegar con algo material para poder celebrar algún acontecimiento relevante en la vida de alguien, que con la inclinación de amor que define al concepto.
En definitiva, y más allá de estas cinco acepciones que nos ofrece el diccionario, moriré creyendo que el cariño no puede ser tan sencillamente definido o comprendido. Cada cual inclinará sus más profundos afectos, amores, nostalgias y añoranzas en los aspectos más relevantes de su vida. Por mi parte he elegido escribir sobre el cariño a propósito de lo complejo que puede llegar a ser que este sentimiento sea simplemente recíproco o correspondido. Porque entonces si el cariño es la inclinación de amor o buen afecto que se siente hacia alguien (o algo), ¿qué uso tiene si ese alguien no es capaz de inclinar su amor o afecto al mismo nivel de vuelta? En el intertanto que encuentro la respuesta, seguiré haciendo las cosas que hago con cariño, miraré a los ojos con cariño, hablaré con cariño y trataré de vivir mi vida con cariño, para que más temprano que tarde me traten de la misma forma.
Con cariño,
CaFeDiTo